Una perrita de Texas, en Estados Unidos, se escapó de su casa hace siete años al no poder soportar el ruido de los fuegos artificiales. Ahora, Jazzy se ha podido reunir con sus dueños después de que la encontraran abandonada en un hotel de Florida, a más de 1.000 kilómetros de su hogar. 

Jazzy, que tiene 12 años, fue rescatada el mes pasado por agentes de los Servicios para Animales del Condado de Orange. Se la encontraron en una habitación de hotel en unas condiciones lamentables. Tenía mucha hambre y sed y prácticamente no podía moverse al tener artritis. 

Los agentes creyeron que la perrita no tenía demasiado futuro: era demasiado mayor y con problemas de salud para que alguien quisiera hacerse cargo. Sin embargo, comprobaron que tenía microchip y se pusieron en contacto con su familia, que vive en Fort Worth, en el estado de Texas.


Kerry Smith recibió una de las mejores llamadas de su vida.
Cuando Smith recibió la noticia de que su perra estaba viva, viajó a Orlando para poder recoger a su perrita. «Les contamos sobre sus problemas de salud, su condición actual, y les dejamos saber sus opciones. Nunca dudaron. Kerry, el dueño de Jazzy, cogió un avión de Texas a Florida unos días después, y hoy, los reunimos. No sabemos cómo Jazzy terminó aquí en Orlando, o cómo ha sido su vida. Pero después de siete años, Jazzy finalmente se iba a casa», han explicado los Servicios para Animales del Condado de Orange, reseñó La Vanguardia.