La gran diferencia entre los perezosos y los clinofílicos es que mientras los primeros son contrarios a la realización de ninguna actividad que requiera un mínimo de esfuerzo físico o mental, los segundos sólo desean permanecer reclinados.
A pesar de que cualquiera está expuesto a padecerla en cualquier momento, suele tener una especial incidencia en las mujeres de entre 20 y 40 años, como consecuencia de los cambios hormonales que se originan durante el ciclo menstrual. El otro gran grupo de riesgo es el conformado por las personas mayores.
¿Lo sabías?







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