Esta semana está previsto que se lleve a cabo en Alabama la primera ejecución conocida con gas nitrógeno. El condenado es Kenneth Smith, quien fue sentenciado a pena de muerte por su papel en el asesinato por encargo de Elizabeth Sennett en 1988.

Poco se sabe del método, la hipoxia de nitrógeno durante un período de ejecución de 30 horas de jueves a viernes, ya que el protocolo publicado por el estado tiene redacciones que, según los expertos, protegen detalles clave del escrutinio público.

«Este es un protocolo que ha sido creado de la nada», dijo Robin Maher, director ejecutivo del Death Penalty Information Center, una organización sin fines de lucro que critica los problemas al administrar la pena capital en Estados Unidos, pero no adopta una postura sobre esa política en sí.

«No hay precedentes para esto (…) No hay pruebas de este procedimiento. Nadie sabe cómo va a ocurrir”, dijo Maher a CNN.

Con información de CNN