Una sorprendente noticia ha conmocionado a la comunidad religiosa de Ariano Irpino, Italia. Una monja, perteneciente a la Congregación del Espíritu Santo, ha sido detenida bajo arresto domiciliario acusada de un millonario robo de joyas y objetos de oro.

La investigación se inició a raíz de una denuncia presentada por el obispo local, quien reportó la desaparición de valiosas alhajas donadas por los fieles. Tras una exhaustiva investigación, las autoridades lograron identificar a la monja como la principal sospechosa.

Según se ha revelado, la religiosa, quien ostentaba el cargo de madre superiora, sustrajo objetos valorados en aproximadamente 80 mil euros. Posteriormente, vendió las joyas y transfirió el dinero obtenido al extranjero.

Ante las evidencias presentadas, la monja confesó el delito. El juez a cargo del caso ha emitido una orden de arresto domiciliario mientras continúan las investigaciones para determinar si existió complicidad de otras personas en este hecho.