La respiración, un acto tan cotidiano y automático, esconde un potencial transformador para nuestra salud física y mental. Si bien es cierto que prestar atención a la respiración se ha vuelto tendencia en los últimos años, esta práctica ancestral tiene sus raíces en disciplinas como el yoga y la meditación.

La respiración es un reflejo de nuestro estado interno. Cuando estamos estresados, nuestra respiración se acelera, mientras que en momentos de calma se vuelve más lenta y profunda. Al tomar conciencia de nuestro patrón respiratorio, podemos influir en nuestras emociones y estados de ánimo.
El breathwork o trabajo respiratorio consciente se ha posicionado como una herramienta fundamental para el desarrollo personal. A través de técnicas respiratorias específicas, el breathwork permite acceder a nuestro subconsciente y liberar emociones reprimidas, reduciendo el estrés y fomentando la calma. Según Marta Plannells y Juan D’Angelo, fundadores de The Breath Act, «el breathwork es un viaje hacia nuestro interior, una oportunidad para sanar y transformar».
Al practicar breathwork, no solo oxigenamos nuestro cuerpo, sino que también oxigenamos nuestra mente, favoreciendo la claridad mental y la conexión con nuestro ser interior.







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