El pequeño y sabio Maestro Yoda, uno de los personajes más emblemáticos de Star Wars, ha cautivado a millones de fanáticos desde su primera aparición en «El Imperio Contraataca». Su diminuto tamaño, sabiduría milenaria y peculiar forma de hablar lo han convertido en un símbolo de la filosofía Jedi.

Durante años, los seguidores de la saga han especulado sobre los orígenes de Yoda y su sorprendente parecido con un genio de la humanidad: Albert Einstein. Las arrugas sabias y la mirada penetrante del Maestro Jedi han llevado a muchos a creer que el físico teórico fue una fuente de inspiración para su creación.

Esta teoría ha encontrado eco en las declaraciones de Stuart Freeborn, el maquillador encargado de dar vida a Yoda en la pantalla. Según Freeborn, las características faciales del personaje, especialmente sus arrugas y su mirada, fueron diseñadas intencionalmente para evocar la sabiduría y la profundidad intelectual de Einstein. «Era una mezcla de sabiduría e ingenio lo que Freeborn quería para Yoda, y los ojos de Einstein tenían esa intensidad», asegura Nick Maley, exasistente del artista.