La cantante estadounidense Meghan Trainor ha revelado públicamente los inconvenientes de someterse a tratamientos estéticos. En un reciente episodio de su podcast, “Workin’ On It”, la intérprete de “All About That Bass” confesó que se ha inyectado bótox en múltiples ocasiones, lo que ha tenido como consecuencia la pérdida parcial de la movilidad de sus músculos faciales.

“Ya no puedo sonreír”, admitió Trainor, sorprendiendo a sus seguidores. La artista atribuyó esta situación a la aplicación excesiva de bótox, especialmente en la frente y los labios. “Alguien me convenció de que necesitaba hacerlo”, explicó la cantante, quien ahora busca soluciones para revertir los efectos de estos procedimientos.

Esta confesión de Trainor ha generado un amplio debate en las redes sociales sobre los riesgos de la cirugía estética y la importancia de una imagen corporal positiva. Muchos fans han expresado su apoyo a la cantante y han aplaudido su honestidad al compartir su experiencia.