La Policía de Portugal ha asestado un duro golpe al cibercrimen con la detención del responsable del desarrollo de WormGPT, un modelo de inteligencia artificial (IA) diseñado para facilitar actividades ilícitas. El arresto, ocurrido el miércoles 12 de febrero en el norte del país, marca un hito en la lucha contra la creciente amenaza de la IA generativa utilizada para fines maliciosos.

El detenido, un joven de 22 años, será sometido a un primer interrogatorio judicial para determinar las medidas cautelares necesarias. La Policía Judicial (PJ) explicó en un comunicado que WormGPT es un modelo de lenguaje similar al popular ChatGPT, pero «sin las limitaciones del original y con funcionalidades adicionales» que lo convierten en una herramienta peligrosa en manos de ciberdelincuentes.

Lanzado a principios de 2023, WormGPT se comercializaba en foros de piratas informáticos y permitía a sus usuarios automatizar actividades maliciosas con una facilidad sorprendente. Este modelo de IA generativa podía ser utilizado para crear guiones de phishing altamente convincentes, desarrollar virus y malware de forma casi instantánea, y llevar a cabo fraudes financieros, ciberataques, espionaje corporativo y campañas de desinformación.

Lo más alarmante es que WormGPT permitía a personas sin conocimientos técnicos avanzados llevar a cabo estas actividades ilícitas, democratizando el cibercrimen y ampliando su alcance. La capacidad de automatización y la facilidad de uso de esta IA representaban un desafío significativo para las autoridades y expertos en ciberseguridad.

Durante la operación, la policía incautó la infraestructura informática base del sistema, así como documentos y otros datos relevantes para la investigación.

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