La salud del Papa Francisco sigue siendo motivo de preocupación entre los feligreses tras el anuncio de que ha desarrollado neumonía bilateral. Este martes, los médicos del Hospital Gemelli informaron que el Santo Padre requiere terapia antibiótica con corticoides para tratar su condición.

Según un comunicado de la Santa Sede, una tomografía computarizada de tórax realizada al Papa reveló la aparición de neumonía bilateral, lo que ha llevado a la necesidad de terapia farmacológica adicional. Este nuevo cuadro clínico se suma a sus antecedentes de bronquiectasias y bronquitis asmática, que complican su sistema respiratorio.

A pesar de la gravedad de su estado, el Vaticano informó que el Papa pasó una noche tranquila en el hospital, donde ha estado internado desde hace cinco días. «El Papa se despertó y desayunó», indicaron las autoridades eclesiásticas, al tiempo que subrayaron que su situación sigue siendo «compleja» debido a una infección polimicrobiana.

En un gesto de serenidad, el sumo pontífice recibió la eucaristía en la mañana y ha alternado entre el descanso, la oración y la lectura de textos a lo largo del día. El Vaticano también destacó que el Papa Francisco agradece las muestras de apoyo y cercanía que ha recibido en este difícil momento, instando a todos a continuar rezando por su salud.