En un giro inesperado, un hombre sin hogar de 59 años, residente de un centro de acogida nocturno en Taranto, Italia, descubrió que figuraba como representante legal de una empresa que había recibido una financiación de 1.2 millones de euros. El sorprendente hallazgo ocurrió en 2021 mientras el hombre solicitaba el ingreso mínimo vital, un subsidio económico para personas en situación de vulnerabilidad.

Debido a su inesperada situación legal, el hombre se vio imposibilitado para recibir el subsidio. Ante la inusual circunstancia, decidió presentar una denuncia que desencadenó una compleja investigación.

La investigación reveló que tres empresarios, de 52, 39 y 74 años, estarían involucrados en una estafa agravada, suplantación de identidad y defraudación a persona incapacitada. Los sospechosos habrían persuadido al hombre para que firmara documentos sin su conocimiento, nombrándolo administrador de una empresa de construcción mecánica que posteriormente recibió un préstamo millonario.

la Fiscalía de Taranto deberá determinar si procede con un juicio formal contra los tres empresarios. Mientras tanto, el hombre sin hogar, que aún reside en el centro de acogida de Cáritas, ha recibido asistencia legal y social para afrontar las consecuencias de esta increíble situación.