Una pareja inglesa, Amanda y Nathan, demostró que el amor verdadero puede tener un toque de magia y un gran corazón. Tras 18 años de relación, la pareja decidió formalizar su unión de una manera poco convencional: celebrando su casamiento disfrazados como los entrañables personajes de la película animada «Shrek». Amanda lució como la princesa Fiona, mientras que Nathan se metió en la piel del ogro verde, protagonizando una boda de cuento de hadas en la vida real.

La originalidad no terminó ahí. Los novios invitaron a sus seres queridos a sumarse a la fantasía, pidiéndoles que asistieran a la ceremonia vestidos como sus personajes favoritos de cuentos infantiles. La celebración se convirtió así en un colorido desfile de princesas, príncipes, hadas y criaturas fantásticas, creando un ambiente festivo y lleno de alegría.

Pero la excéntrica fiesta tenía un propósito aún más noble. Tras haber perdido a varios amigos a causa del cáncer, Amanda y Nathan tomaron una decisión altruista. En lugar de recibir los tradicionales regalos de boda, la pareja solicitó a sus invitados realizar donaciones a la investigación científica contra esta enfermedad. Un gesto conmovedor que transformó su día especial en una oportunidad para contribuir a una causa que les toca de cerca.

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