Una reciente encuesta de alcance mundial, llevada a cabo por investigadores de la prestigiosa Universidad Monash en Australia, ha arrojado luz sobre la sorprendente prevalencia de experiencias paranormales en la vida cotidiana de las personas. Los resultados revelan que un significativo 70% de los encuestados afirma haber vivido al menos un episodio de naturaleza inexplicable. Este hallazgo subraya cómo fenómenos que desafían la comprensión racional, desde la percepción de presencias invisibles hasta la manifestación de ruidos inusuales o la inquietante sensación de no estar solo, continúan siendo una parte intrínseca de la realidad percibida por una vasta mayoría a nivel global.

La encuesta también profundizó en el ámbito de las experiencias intuitivas, revelando que un aún mayor 80% de los participantes asegura haber experimentado en algún momento una premonición. Estas intuiciones, que a menudo se describen con la frase «lo sentí venir», representan momentos en los que una sensación anticipatoria precede a un acontecimiento concreto. La alta incidencia de estas experiencias sugiere una conexión profunda y quizás subestimada entre la percepción humana y la anticipación de eventos futuros, alimentando aún más el debate sobre los límites de la comprensión científica tradicional.

A pesar de la ausencia de una explicación científica concluyente que abarque la totalidad de estos fenómenos, lo paranormal se mantiene como un componente significativo del imaginario colectivo en diversas culturas alrededor del mundo. Las interpretaciones varían ampliamente, desde la creencia en energías sutiles e invisibles hasta la atribución a una forma elevada de intuición humana. Esta diversidad de perspectivas refleja la naturaleza subjetiva y personal de estas vivencias, así como la profunda necesidad humana de encontrar significado y explicación a lo que escapa a la lógica convencional.

En última instancia, la investigación de la Universidad Monash pone de manifiesto la persistente fascinación de la humanidad por lo desconocido. Ya sea considerado como una manifestación de lo inexplicable, una extensión de las capacidades sensoriales humanas o simplemente una construcción cultural compartida, lo paranormal continúa moldeando la forma en que muchas personas experimentan y entienden el mundo que les rodea.