Salma Hayek capturó todas las miradas a su llegada al desfile de Alta Costura de Balenciaga en París, evocando el glamour de las divas del cine de los años 50. Acompañada de su esposo, François-Henri Pinault, presidente y consejero delegado de Kering, grupo propietario de la casa de modas, la actriz mexicana lució un elegante vestido largo de terciopelo negro con un escote redondo y una silueta ceñida que realzaba su figura. Su atuendo se complementó a la perfección con unos llamativos pendientes dorados en forma de corazón y unas gafas de sol oscuras, consolidando una estética retro y sofisticada.

La aparición de la estrella en el evento de la colección Otoño/Invierno 2025/2026 de Balenciaga, celebrado el 9 de julio durante la Semana de la Moda de París, no pasó desapercibida. Hayek optó por un peinado recogido que dejaba a la vista sus canas, un gesto que ha sido aplaudido como una declaración de autenticidad y seguridad.