Cae en Colombia uno de los cabecillas del Tren de Aragua más buscados por Chile.

En un operativo coordinado entre autoridades de Colombia y Chile, fue capturado en la ciudad de Barrancabermeja (Santander) el ciudadano venezolano Alberto Carlos Mejía Hernández, señalado como uno de los miembros más buscados de la organización criminal transnacional Tren de Aragua en territorio chileno.
La detención se materializó gracias a una notificación roja de Interpol, en una operación conjunta que involucró a la Policía colombiana, la Oficina Central de Interpol en Chile y los Carabineros de ese país.
Mejía Hernández era requerido por su presunta participación en la planificación y ejecución de varios asesinatos. Entre los crímenes que se le atribuyen destaca el homicidio del prestamista informal José Felipe Reyes Ossa, conocido como ‘El Rey de Meiggs’, ocurrido el pasado 19 de junio en la comuna de Ñuñoa, en Santiago de Chile. El general Carlos Fernando Triana, director de la Policía de Colombia, confirmó los detalles a través de sus redes sociales.
Proceso de extradición en marcha
Tras su captura, el sospechoso fue puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación de Colombia. Las autoridades chilenas lo solicitan por el delito de homicidio calificado, por lo que se iniciarán los trámites diplomáticos correspondientes para su extradición a Chile, donde deberá enfrentar a la justicia.
El Tren de Aragua, una banda que se originó en las cárceles de Venezuela, ha expandido sus operaciones a varios países de América Latina, incluyendo Colombia, Perú, Bolivia y Chile. Sus actividades delictivas abarcan narcotráfico, extorsión, secuestros y homicidios, representando una amenaza para la seguridad regional.
Actualmente, la Embajada de Estados Unidos en Colombia, en colaboración con la policía local, ofrece recompensas que suman 12 millones de dólares por información que conduzca a la captura de tres de los principales líderes de la organización: Héctor Guerrero Flores, alias ‘Niño Guerrero’ ($5 millones), Yohan José Romero, alias ‘Johan Petrica’ ($4 millones), y Giovanny San Vicente ($3 millones), acusados de conspiración criminal, narcotráfico, trata de personas y lavado de dinero.