Este lunes, el gobierno venezolano anunció la activación de la «Zona de Paz Número 1» en los estados fronterizos de Zulia y Táchira, con un despliegue inicial de más de 15,000 hombres y mujeres. El vicepresidente sectorial de Seguridad Ciudadana, Diosdado Cabello, informó que esta medida forma parte del refuerzo de la «Operación Relámpago del Catatumbo» y tiene como objetivo principal resguardar la frontera con Colombia, para lo cual se emplearán tropas de aviación, unidades fluviales y drones.

Cabello destacó el papel fundamental de las Unidades de Reacción Rápida de Combate (URRA), las cuales se encuentran desplegadas en todo el territorio nacional para garantizar una respuesta inmediata ante cualquier eventualidad que atente contra la paz. Subrayó que estas unidades, dotadas según la tarea específica que les corresponda, han sido «efectivas y eficientes» en el desmantelamiento de grupos criminales y en la incautación de armamento, como en un reciente operativo en el municipio El Hatillo, estado Miranda.

El vicepresidente también enfatizó la creación de un «cuerpo orgánico fusionado» compuesto por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y el pueblo organizado. Según Cabello, la participación ciudadana, a través de la «inteligencia popular», es un pilar fundamental en esta estrategia de seguridad, ya que las comunidades y los productores locales actúan como el primer filtro de alerta ante situaciones irregulares, proporcionando información clave a las autoridades.

Finalmente, Cabello hizo un llamado al gobierno de Colombia para que «haga lo propio» y colabore en asegurar la paz en la zona fronteriza y evitar la proliferación de delitos. Afirmó que estas acciones buscan combatir alianzas criminales, a las que denominó «NARCOBAND», que, según dijo, intentan desestabilizar el país y hacerse del poder mediante alianzas con «delincuentes, asesinos, terroristas y narcotraficantes», asegurando que la Zona de Paz representa el consenso de los venezolanos por la seguridad.