Este lunes 1 de septiembre, dieron inicio las festividades en honor a la Virgen del Valle con la tradicional y solemne Bajada de su sagrada imagen. La programación litúrgica comenzó con una Celebración Eucarística y la entronización de la Patrona del Oriente, un acto presidido por Monseñor Fernando Castro Aguayo, Obispo de la Diócesis de Margarita, quien estuvo acompañado por el Clero Diocesano. Cientos de devotos se congregaron para presenciar el emotivo momento en que la imagen de «Vallita» desciende de su camarín para estar más cerca de su pueblo, marcando el comienzo de las celebraciones en su honor.

En esta ocasión, la ceremonia estuvo revestida de un profundo significado gracias al gesto de Yaneth Elarba, una devota oriunda de Maturín, quien cumplió su anhelado sueño de donar el vestido que lució la Virgen. La historia detrás de esta ofrenda es un testimonio de fe y perseverancia, motivado por una promesa hecha por la salud de su hijo, quien superó con éxito un trasplante de riñón. «El vestido fue siempre soñado. Siempre quise poder vestir a la Virgen», relató Yaneth, explicando la dificultad y el largo tiempo de espera para obtener este privilegio. La recuperación de su hijo fue el milagro que, el año pasado, le abrió las puertas para recibir el patrón y confeccionar el traje como muestra de su inmensa gratitud.

El manto, una obra de arte diseñada y bordada por el reconocido modista Nidal Noauihed, es un reflejo de dedicación y esmero. «No tiene figura, es todo bordado, piedra por piedra, pintado y trabajado con mucho esmero», detalló Yaneth, destacando las incontables horas invertidas en su creación. Más allá de su valor material, para ella este acto representa una confirmación divina. «Sentí que la Virgen me dio la oportunidad de decirme: tu hijo está curado, está sanado, puedes hacer el vestido», expresó con visible emoción, convirtiendo la prenda en un símbolo de esperanza y fe cumplida.

Las festividades continuarán con una nutrida agenda durante los próximos días. El domingo 7 de septiembre se celebrarán misas a lo largo del día y, a partir de las 8:00 p.m., se dará inicio a la víspera de la solemnidad con el rezo del Santo Rosario y el traslado de la imagen al Campo Eucarístico. El día central, lunes 8 de septiembre, Solemnidad de la Natividad de la Virgen, comenzará con una eucaristía a la medianoche y se extenderá con misas durante toda la madrugada, culminando con la Solemne Eucaristía Pontifical a las 8:00 a.m., presidida por el Nuncio Apostólico de Venezuela, Mons. Alberto Ortega Martin, seguida de la tradicional procesión a las 5:00 p.m. por la Plaza Mariño.