En un incidente que ha empañado el ambiente deportivo del US Open, Piotr Szczerek, el millonario CEO de la empresa polaca Drogbruk, se vio envuelto en una controversia mundial tras ser captado en video arrebatándole a un niño una gorra autografiada por el tenista Kamil Majchrzak. Las imágenes, que se difundieron rápidamente por las redes sociales, muestran el momento exacto en que el ejecutivo intercepta el regalo que el jugador destinaba a un joven seguidor, generando una ola de indignación entre los internautas y asistentes al torneo.

Ante la avalancha de críticas, Szczerek emitió una declaración pública en la que calificó el suceso como un «malentendido» y aseguró no haber tenido la intención de causar daño. En su defensa, argumentó que la situación se dio en un momento de euforia y confusión tras el partido. A pesar de sus disculpas, la percepción pública se mantuvo mayoritariamente negativa, con miles de usuarios expresando su desaprobación por la conducta del empresario.

La polémica trascendió el ámbito deportivo y personal, impactando directamente en la reputación de su compañía, Drogbruk. Las plataformas de reseñas como Google y Trustpilot se inundaron de comentarios negativos y calificaciones de una estrella, en una campaña de «review bombing» que castigaba la acción de su director ejecutivo. La presión fue tal que Piotr Szczerek se vio forzado a desactivar sus cuentas personales en redes sociales para mitigar el incesante escrutinio público al que estaba siendo sometido.