La ciudad de Medellín se encuentra de luto y consternada tras el trágico fallecimiento de Nairkel Botia, un niño venezolano de tan solo 4 años, quien murió este martes 16 de septiembre. El deceso ocurrió luego de tres días de agonía, producto de una brutal golpiza que presuntamente le propinó su padrastro.

El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, confirmó la lamentable noticia a través de sus redes sociales, indicando que el pequeño luchó por su vida en el Hospital General de Medellín, pero las graves heridas resultaron fatales.

El principal sospechoso del atroz crimen, Cristian González Gallego, alias “Lámpara”, fue capturado por las autoridades. El alcalde Gutiérrez precisó que González Gallego es un miembro activo de la banda criminal “Los Mondongueros”.

La rápida detención del presunto agresor ahora pone el caso en manos de la justicia, que deberá responder por un acto de violencia que ha causado una profunda indignación en la comunidad.
La trágica muerte de Nairkel ha puesto de relieve la vulnerabilidad de los niños y ha impulsado un llamado urgente a las autoridades y a la sociedad para reforzar la protección de la infancia.