El gobierno de Donald Trump ha emitido una nueva directriz al Departamento de Estado que instruye a las autoridades consulares a negar visas de residencia a extranjeros cuyas condiciones médicas o edad avanzada puedan considerarse una «carga pública» para el país.

La medida, que reinstaura un principio clave de su primera administración, amplía significativamente los criterios de inelegibilidad más allá de los exámenes médicos tradicionales.

Salud y Edad en la Mira

La directriz, según reportes, instruye a los oficiales consulares a considerar la salud del solicitante como un factor central en la decisión. Específicamente, señala afecciones como la obesidad y la diabetes, argumentando que pueden requerir «atención médica costosa y prolongada» sin depender de asistencia social.

Además de las condiciones de salud, la normativa establece que una persona puede ser declarada inelegible por su edad, si se estima que tiene mayor probabilidad de depender de la asistencia pública en el futuro.

La directriz exige también evaluar los recursos financieros del solicitante para costear cualquier tratamiento y extiende el escrutinio al estado de salud de sus familiares directos, incluyendo hijos y padres mayores.

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