La costa de Tenerife, en las Islas Canarias (España), vivió una jornada trágica el sábado, cuando un inusual y violento temporal de oleaje golpeó el litoral norte de la isla. El balance final de los múltiples incidentes causados por los «golpes de mar» fue de tres personas fallecidas y al menos quince heridas. El fenómeno costero, de una virulencia excepcional, obligó a activar la alerta máxima y desbordó a los servicios de emergencia, que recibieron cientos de llamadas.

Uno de los sucesos más graves, cuya dureza fue captada en vídeo, tuvo lugar en el municipio de Puerto de la Cruz. En esta localidad, una mujer perdió la vida y otras nueve personas resultaron heridas, tres de ellas de carácter grave, tras ser sorprendidas por la fuerza del agua en una zona de piscinas naturales y restaurantes. Las imágenes difundidas mostraron cómo el oleaje rebasaba con extrema violencia las barreras costeras, arrastrando mobiliario y golpeando a los transeúntes.

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