
En la diligencia de este lunes, el juez Robert Scola ha decidido posponer el inicio del juicio del empresario colombiano, previsto originalmente para el próximo 3 de enero, hasta que se resuelva una apelación que presentó la defensa.
Los abogados de Saab defienden que su cliente tiene estatus diplomático y que no puede ser juzgado en Estados Unidos.
La estrategia de la defensa apela al mismo argumento que ha hecho el Gobierno de Maduro: aseguran que Saab es un “agente diplomático”, comisionado para conseguir alimentos y medicinas en medio del bloqueo estadounidense a Venezuela y que por eso goza de inmunidad.