
La ciudad de Jersón, en el sur de Ucrania, y que fue tomada por el Ejército ruso a principios de marzo, se encuentra al borde de la catástrofe humanitaria, denunció el Ministerio de Exteriores ucraniano.
«La situación humanitaria se está deteriorando rápidamente. La ciudad carece críticamente de alimentos y suministros médicos debido al asedio. Los recién nacidos, que carecen de productos de nutrición e higiene infantil, y los pacientes graves constituyen la población de especial riesgo», señaló en un comunicado el ministerio.
Afirma que «los invasores rusos toman represalias contra los residentes de la ciudad» y recuerda que este lunes abrieron fuego contra manifestantes pacíficos en la plaza de la Libertad, hiriendo a un anciano.
El ministerio agrega que «alrededor de cien estudiantes internacionales, principalmente de países africanos, se encuentran actualmente en Jersón»./EFE