Su primera motivación para salir en busca de un trabajo fue no tener que pedirle dinero a su familia para mantenerse. Pese a que por su edad, se podría pensar que la abuelita no tendría muchas posibilidades, pero una empresa de vinos le hizo una atractiva oferta.
Desde hace un par de años, María comenzó a ser muy popular en las redes sociales. Además, recientemente, se dio a conocer que es amante de los buenos vinos, por lo que solicitó un trabajo en el que pudiera aprovechar ese gusto y, a la vez, no depender de su familia.
Con ayuda de sus bisnietas, María pudo armar su currículum. Una de ellas se encargó de llevarlo al frigorífico en el que trabaja, en Sao Paulo. Cuando el documento llegó a manos del departamento de recursos humanos, la jefa, Juliana Araujo, quedó impresionada y celebró la iniciativa de que a su edad la mujer tuviera muchas las ganas de trabajar.
Juliana quedó tan sorprendida con la actitud de María que compartió la historia de la abuelita en sus redes sociales. Fue así que tras la difusión las ofertas de trabajo comenzaron a llegar hasta que una vitivinicultora le ofreció un trabajo muy tentador como catadora de vino.
Uno de los representantes de la empresa fue quien se convenció de que María era la imagen ideal para promover la marca, por lo que tras llegar a un acuerdo, le envió varios vinos para degustar y ahora, dos años después, María es una influencer de esta marca de vino
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