La policía de Nueva York desalojó anoche al grupo de 40 inmigrantes, en su mayoría jóvenes venezolanos, que durante los últimos tres días se rehusaban a abandonar un céntrico hotel en Manhattan, luego que las autoridades de esa ciudad decidieron reubicarlos a un refugio en Brooklyn.
El grupo de “rebeldes” durmió durante cuatro días en las afueras del hotel en colchonetas y carpas para exigir a la Ciudad un mejor lugar para vivir al reclamar que su nuevo destino no tenía calefacción, clóset privados, ni las comodidades necesarias.
Luego de días de negociaciones, las autoridades decidieron avanzar en lo que calificaron como “una limpieza de la calle”. Advirtieron que quienes se opusieran a la medida serían detenidos.
El operativo policial no arrojó forcejeos, ni arrestos.
Los jóvenes quienes en su mayoría pasaron la frontera sur de México de forma ilegal en los últimos seis meses y que solicitaron refugio en la Gran Manzana, estaban exigiendo con el apoyo de algunas organizaciones locales, que les garantizaran “viviendas permanentes”.
La actitud de los inmigrantes venezolanos que se hizo viral en las redes sociales, causó el repudio de la comunidad inmigrante venezolana en Estados Unidos.
“El 99.9% de quienes llegamos a este país, queremos hacerlo bien, queremos trabajar, queremos progresar. No ser unos parásitos. Queremos dejarle claro al mundo que ellos no son la mayoría de los venezolanos. Son la gran excepción”, expresó en las afueras del hotel un caraqueño que llegó a Nueva York hace un año.
Fotos y texto:@fermartinezm
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