En el transcurso de los últimos años algunos científicos han desarrollado la hipótesis sobre el origen del Alzheimer.
Un estudio de la revista Science Advances, un grupo de investigadores afirman que encontraron evidencia de la relación entre una bacteria presente en la periodontitis crónica, un tipo de enfermedad de encía muy común, y las personas que padecen de Alzheimer.

La bacteria Porphyromonas gingivalis produce una proteína que destruye las células nerviosas en el cerebro, lo que a su vez conduce a la pérdida de la memoria y, en última instancia, al alzhéimer.
Los investigadores habían descubierto previamente que las bacterias que causan la gingivitis pueden pasar de la boca al cerebro, donde las enzimas dañinas que excretan pueden destruir las neuronas.
Los autores de la investigación aseguran en su estudio que «nuestra identificación de antígenos de gingipaina en los cerebros de personas con enfermedad de Alzheimer y también con patología de esta enfermedad pero sin haber sido diagnosticados de demencia, sostiene que la infección cerebral con Porphyromonas gingivalis no es el resultado de una atención dental deficiente después del inicio de la demencia o una consecuencia de la enfermedad, sino un evento temprano que puede explicar la patología encontrada en personas de mediana edad antes del deterioro cognitivo».